Por: Katherine Estrada.
El arte es un modo de expresión en todas las actividades esenciales de un niño, con el arte los niños desde temprana edad intentan decirnos muchas cosas, desde sus emociones, estados de ánimo, lo que piensan de nosotros o de las personas en general a su alrededor, hasta sus deseos o sueños.
El arte es una forma de conocimiento tan precioso para los niños que con ella podemos saber que le pasa en su entorno diario.
El arte conforma un lenguaje que se mueve a través de diferentes elementos, como el movimiento, un gesto, la palabra, la imagen o la luz, entre otros, que permiten que los niños se expresen a su gusto Y tienen como particularidad: la creatividad. En ese sentido, es una manera de vivir, de ser integral, y cuando los niños tienen contacto con el arte desde temprana edad, los beneficios son múltiples. Mejor dicho, no implica que los niños se vuelvan artistas, cantantes o bailarines, sino que experimenten diversas actividades que les permitan ser sensibles y crecer como personas.
Lo que hace el arte; es dar conciencia a las emociones, sensaciones y de todos los conflictos que el ser humano tiene dentro; es un sistema completo que se trabaja desde temprana edad que empieza en casa.
Es así como el arte es más que un talento, es un proceso de sensibilización ante la vida. Por eso, lo recomendable en sensibilizar a los niños ante el mundo, al hacerlos más sensibles, los niños se vuelven mejores seres humanos. Eso permite que el niño se conozca tanto que puede llegar a decir qué es lo que más le gusta.
El arte es una buena estrategia para la educación en todas las áreas. Desde temprana edad, potencia el pensamiento creativo, reflexivo y crítico de un niño. Es una herramienta de aprendizaje que estimula a crear e innovar, en la que las actividades artísticas hacen y estimulan al niño para que mantenga su atención, pero a la vez tenga la capacidad de adquirir conocimientos diversos.